No visitar tu taller de confianza cuando indica el fabricante de tu coche puede tener consecuencias tanto para tu seguridad como para tu bolsillo. Así lo indican las últimas cifras conocidas acerca de las averías mecánicas: según el RACE, estos problemas aumentaron el 16% el año pasado.
En concreto, el club automovilista sumó 1.217.000 asistencias en carretera durante el año pasado. Durante las mismas pudo comprobar que algunos de los problemas que más han aumentado tienen que ver con la bomba y la inyección en coches diésel, que han subido el 47,2% y que ya suponen el 6,4% del total. Las averías del motor de arranque del coche también destacan entre las asistencias más solicitadas.
En general, los fallos que afectaron al motor, íntimamente relacionados con la falta de mantenimiento, crecieron el 14,6%. Por ejemplo, los derivados del disco de embrague aumentaron casi el 46% y los de la correa del alternador crecieron el 32%. Todos ellos podrían ser detectables en las revisiones periódicas que establece el fabricante del coche.
El problema de descuidar el mantenimiento del coche es que puede convertir un fallo fácilmente predecible y solucionable en una avería costosa. Si se espera a que falle una pieza, no solo pueden verse afectados más componentes relacionados, sino que puede poner en peligro a los ocupantes del vehículo y a los de otros presentes en la vía.
Este último sería el caso, por ejemplo, de un fallo provocado por neumáticos en mal estado o por mal funcionamiento de los frenos, dos tipos de problemas que crecieron el 12% respectivamente el año pasado. Por eso no debes dudar a la hora de llevar periódicamente tu coche a tu taller de confianza para que puedan comprobar el estado de sus distintos elementos.